DÍA 13
7 Julio 2022
Por fin no madrugamos tanto
(aunque luego nos arrepentiríamos de no haber bajado al menos una hora antes).
El barco permitía bajar a tierra en KETCHIKAN a las 6:30h pero no teníamos nada
programado y, además como nos temíamos, estaba lloviendo bastante.
Ketchikan |
Vamos a desayunar y salimos sobre
las 8:30h subiendo al autobús gratuito que nos llevaba al centro de la ciudad.
Ahí nos dimos cuenta del primer error, porque aunque teníamos que estar todos a
bordo a las 12:45h, el último autobús gratuito de regreso al crucero salía de
la ciudad a las 11:00h, muy temprano, demasiado. No nos gustó nada esto porque
te quitaba mucho tiempo de poder estar visitando cosas, estaba mal organizado
por parte de la naviera.
Nos quedábamos sin opciones. Pensamos al llegar a la ciudad en ir a dar un paseo por nuestra cuenta, pero seguía lloviendo bastante y nos iba a costar un poco hacerlo porque había que caminar un poco desde el punto que te deja el autobús.
Por eso, cuando nos deja el
autobús gratuito, vemos unos puestos que ofertaban tours de 2 horas incluyendo
llevarnos al barco después y así ahorrarnos la fila del autobús gratuito de la
naviera (como ya pasó en Juneau). En teoría te incluía el tour ir a un sitio a
ver águilas y, con suerte, osos, ver la calle principal y más bonita de la
ciudad (Creek Street) e ir a un museo de tótems antes de devolverte al crucero,
todo 60$ cada uno.
Decidimos hacerlo porque por
nuestra cuenta lloviendo íbamos a durar media hora para ver la ciudad y
querríamos regresar, así íbamos a poder aprovechar un poco más.
Ketchikan |
Ketchikan |
Subimos al autobús y el tour se
pone en marcha a las 9:45h (un cuarto de hora más tarde de lo previsto).
Estamos más de media hora de camino hasta que llegamos a un punto panorámico
donde ver animales. Había un río pero con poca agua, la carretera al lado
encima con obras, por lo que osos era imposible ver como así fue. Al menos sí
que vimos muchas águilas calvas con su vuelo majestuoso.
Tour Ketchikan |
Vamos regresando a Ketchikan y, cuando
pensábamos que iba a parar en Creek Street para ver esta calle principal unos
minutos y hacer unas fotos, resulta que sólo nos la señala el conductor con el
autobús en marcha y sin parar. Con las ventanillas mojadas por la lluvia fue
una gran decepción porque al final estábamos en Ketchikan pero no íbamos a
poder verlo en sí salvo aquel vistazo rápido desde el autobús. Nos sentimos
engañados, la verdad. Pongo las fotos de internet de lo que vimos fugazmente
para mostrarlo porque yo no pude hacerlas.
Nos llevan pasado el desvío de la carretera del puerto hacia el crucero al museo de tótems llamado Totem Bight State Historical Park, donde el conductor no para de explicar el significado de cada uno de ellos, terminando el tour en la tienda de souvenirs de rigor. Mejor hubiera sido este tiempo emplearlo en la ciudad en vez de en este museo, pero no podíamos hacer nada.
Totem Bight State Historical Park, Tour Ketchikan |
Nos devuelven al barco a las
12:15h y, tras pasar por el camarote y tomar una cerveza, nos vamos a comer
temprano porque teníamos la cena en restaurante de pago (incluido un restaurante
en el paquete de la reserva del crucero) a las 20:00h.
Tras la siesta nos arreglamos y
estamos casi 2 horas charlando en el Draft Beer mientras tomamos algo porque el
espectáculo del teatro volvía a ser el musical de The Six (muy mal este tema de
que se repitan los espectáculos, en ningún crucero de los que hicimos
previamente había pasado algo así).
Vamos a cenar al Q-Texas
Steakhouse. Había poco sitio en el resto de restaurantes cuando fuimos a
reservar el segundo día del crucero y además nuestros amigos son poco de
comidas internacionales o exóticas, así que elegimos este de carnes.
Los platos eran enormes de carne
y condimentos además de los primeros platos también potentes pero no era nada
del otro mundo, las carnes no estaban buenas para ser un restaurante específico
de ellas. Lo bueno es que había música country en directo y que el restaurante
estaba muy ambientado para sentirte en el sur de Estados Unidos.
Después de la cena fuimos al
Atrio donde tocaba el Natural Duo que nos gustaba y aún pasamos por la
discoteca un momento pero nos fuimos pronto porque estaba llena de gente.
De nuevo nos tocaba cambiar el
reloj, ahora adelantarlo una hora porque volvíamos al huso horario del oeste de
Canadá.
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