EGIPTO 2


DÍA 2

12 de Junio 2010


A las 3 de la mañana nos despertamos y después de ducharnos para poder despejarnos, nos vamos todos al autobús y allí nos dan una caja con el desayuno para un poco más tarde. Tenemos 3 horas de camino hasta el destino y aunque estábamos bastante cansados, sin apenas dormir y el viaje de carretera, desayunamos y nos preparamos para la visita.

Eran poco más de las 6 de la mañana cuando llegamos a ABU SIMBEL y ya hacía calor, así que entendimos la necesidad de hacer todas las visitas muy temprano para evitar las horas de mediodía.

Abu Simbel
Los templos son realmente impresionantes Empezamos la visita por el de Ramses II erigido en 1270 a.C. Está formado por varias cámaras en el interior de la montaña y las cuatro estatuas gigantes del faraón en su fachada.

Templo Ramses II, Abu Simbel
Templo Ramses II, Abu Simbel
Tanto este templo como el de al lado de Nefertari tuvieron que trasladarse de lugar al construirse la Gran Presa y los reconstruyeron exactamente igual a la ubicación original. De hecho en la cámara funeraria del templo hay cuatro dioses (incluido Ramses) y siempre en dos fechas del año entra el sol directo a la cámara dejando en sombra únicamente al dios de la oscuridad. Las dos fechas son el nacimiento de Ramses y el día de su coronación (esto ocurría en su ubicación original y también en la actual después del traslado). Es increíble lo que llegaron a crear los egipcios en esa época.

Luego visitamos el templo colindante de Nefertari, la esposa favorita de Ramses, también con varias cámaras internas y seis estatuas en su fachada, cuatro del faraón y dos de su esposa.
Después de un buen rato dando vueltas por el complejo y haciendo un montón de fotos, volvemos todo el grupo al autobús para regresar a Asuan.

Templo Nefertari, Abu Simbel
Antes, durante el camino, paramos un momento en la Gran Presa de Asuán para ver esta gran obra de ingeniería que divide el Nilo en dos y permite controlar sus crecidas. Aún así hay poco para ver y estamos lo justo para hacer una foto.

Gran Presa, Asuán
Llegamos a la ciudad al fin y nos dirigimos a visitar el Obelisco Inacabado. Hubiera sido la pieza de piedra más grande del mundo y es posible que fuera la pareja del obelisco laterano de Karnak (ahora en Roma) pero se resquebrajó y se dejó sin concluir. Sí que permite entender la forma en la que creaban estas enormes pilares de una sola pieza y la manera de tallarlo en el suelo para al final levantarlo.

Obelisco Inacabado, Asuán
Obelisco Inacabado, Asuán
Tras esta visita nos dividimos, ya que parte del grupo (entre los que nos incluíamos) pagamos una excursión fuera del paquete del viaje para la ISLA ELEFANTINA. Hacia allí nos dirigimos en un pequeño barco donde el guía aprovecha para explicarnos la historia del pueblo Nubio (de piel negra) que todavía viven en esa isla dentro del río manteniendo intactas todas sus costumbres.

Isla Elefantina, Asuán
Isla Elefantina, Asuán
Atracamos en la isla y ya nos estaban esperando con nuestro medio de transporte, los camellos. Yo ya hacía disfrutando de la experiencia de montar en camello en Túnez, pero para Leo era la primera vez y aún así sigue siendo toda una maravilla pasear en éstos animales, aunque bajar de ellos sea algo complicado. Nos vamos moviendo todo el grupo en fila en nuestros camellos y la suerte es que el chico que guiaba los nuestros (por cierto que según él se llamaban Cristina y Ricky Martin) nos hizo fotos e incluso nos grabó con la videocámara.

Isla Elefantina, Asuán
Llegamos a una casa típica Nubia, la recorremos mientras nos explican las distintas estancias y después toca un té en compañía de la familia, intento de venta de objetos hechos a mano, tener una cría de cocodrilo encima y la mujer nos pintó un tatuaje de henna a la mayoría de nosotras (yo un dibujo de flores en el tobillo derecho).

Isla Elefantina, Asuán
Isla Elefantina, Asuán
Isla Elefantina, Asuán
Isla Elefantina, Asuán
Antes de regresar al barco, disfrutamos de un baño en las aguas del Nilo, un poco frías pero se agradeció por el calor que hacía, y por supuesto sin encontrarnos con ningún cocodrilo (ya nos explicaron que después de la construcción de la Gran Presa no podían pasar más al norte al no atravesar los conductos).

Isla Elefantina, Asuán
Isla Elefantina, Asuán
Isla Elefantina, Asuán
Volvemos al crucero en el que comemos y descansamos con una merecida siesta mientras se dirige a KOM OMBO donde visitamos el templo al atardecer. Se trata, como algo llamativo, de un templo simétrico con dos entradas, dos salas hipóstilas y dos santuarios. Todo ello porque está dedicado a dos dioses, Haroenis o halcón y Sobek o cabeza de cocodrilo. El templo lo comenzó Ptolomeo VI en el s. II a.C y lo terminó Ptolomeo XII en el s. I a.C.

Templo Kom Ombo
Templo Kom Ombo
Templo Kom Ombo
Después de la visita y antes de subir al barco paseamos por el puerto y sus tiendas de chilabas con intención de comprar una para cada uno porque después nos esperaba fiesta temática en el crucero. La compra fue una odisea con el regateo, pero al final compramos una blanca para Leo y una azul para mí.

Ya en el barco y después de cenar, lo dicho, fiesta en el salón con baile típico, juegos y diversión a pesar del enorme cansancio después de un día tan largo.







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