DÍA 6
24 Octubre 2019
Nos recogen a las 6:00h en el
hotel, así que nos levantamos a las 5:30h y estamos listo para ver la última de
las 7 maravillas del mundo que nos queda, el Taj Mahal.
Sólo nos separan 1,5 kms de la
entrada al complejo así que llegamos muy rápido con el coche donde dejamos los
bolsos y sólo cogemos la cámara, la videocámara y dinero. Junto a nuestro guía
caminamos los 500 metros hasta las taquillas y allí él se encarga de comprar
las entradas (nosotros las tenemos incluidas pero decir que son 1300 rup por
persona). Con la entrada te dan una botella de agua y unas calzas para cubrir
los zapatos una vez que se llega al mausoleo.
Comenzamos la visita
dirigiéndonos primero a la puerta principal. La Gran Puerta de Darwaza-i Rauza
es una maravilla de la arquitectura mogol. Separa el patio interior y los
jardines y es la única entrada real al sitio Taj Mahal y es de ladrillo
cubierto con piedras rojas y mármol blanco.
Al pasar la puerta hay que dejar
la videocámara (no está permitida su entrada y hay que pagar 25 rup por el
depósito) y tras la explicación del guía podemos ver todo recto, por fin, los
jardines y el mausoleo o palacio al fondo.
Sobrecoge el verlo y desde este
primer mirador comenzamos a hacer fotos entre toda la gente que también había
acudido a primera hora.
Taj Mahal, Agra |
Los jardines (Chahar bagh) son un
cuadrado de 300 m de lado dividido en 4 partes por 4 planos de aguas tranquilas
(cuando las fuentes no están funcionando) en las que se refleja el mausoleo.
Están orientados hacia los 4 puntos cardinales.
Jardines Chahar Bagh, Taj Mahal, Agra |
Después de toda la explicación
del guía, nos deja una hora más de tiempo libre para, como era de esperar,
hacer un montón de fotos desde todos los ángulos y quedarnos tranquilos en un
banco mirando la maravilla que teníamos ante nuestros ojos.
Además según nos había dicho el
guía habíamos tenido suerte porque no había tanta gente como otros días, así
que conseguimos unas imágenes increíbles. Estuvimos dentro 2 horas y media pero
hay que decir que el máximo de tiempo que permiten es de 3 horas, lo cual lo
controlan con el ticket de entrada.
Encantados con los que habíamos
visto nos llevan de nuevo al hotel (eran las 9:00h) y nos dan una hora para
desayunar tranquilos antes de continuar la visita. Nos da tiempo hasta de
descansar un poco en la habitación y, a las 10:00, ya estábamos de nuevo con el
guía y el conductor para ir al Fuerte de Agra o fuerte rojo.
El fuerte de Agra, también
llamado Lal Qila fue construido en piedra de arenisca roja (a lo que se debe el
nombre), por el emperador mogol Akbar entre 1565 y 1573, y puede ser descrito
con mucha más exactitud como un palacio amurallado, que encierra en su interior
un impresionante conjunto de palacios y edificios señoriales con estilos
arquitectónicos que varían desde la complejidad de lo construido por el emperador
Akbar hasta la simplicidad de lo construido por su nieto Shah Jahan y rodeado
de un profundo foso que se llenaba de agua del río Yamuna.
Entramos al fuerte acompañados
por el guía y tras pagar 25 rup por la videocámara y recorremos todos los
palacios que se encuentran en su interior, incluido en el que estuvo preso el
rey que construyó el Taj Mahal tras encerrarlo 10 años hasta su muerte su
propio hijo, eso sí de cárcel o celda tenía poco porque es muy lujoso.
Hacemos de nuevo muchas fotos,
incluyendo una dándole de comer a una ardilla (previo billete de 20 rup al que
me da la comida).
Regresamos al coche para terminar el tour del día en la
típica cooperativa familiar que trabajan la técnica de incrustación de piedras
semipreciosas en el mármol, tal y como se ven en el Taj Mahal. Por supuesto,
después de la explicación, pasamos a la tienda para intentar vendernos algo y,
tras no comprar nada, nos llevan al hotel y nos despedimos del guía tras darle
la propina.
Sólo eran las 12:00h, así que
como encima no estaba hecha la habitación, bajamos a la piscina y nos damos un
baño corto porque la verdad, el agua estaba bastante fría.
Decidimos a las 14:00h ir a comer
a un Pizza Hut que estaba a cuatro calles del hotel y que se veía desde la
terraza y pedimos 1 pizza mediana, patatas fritas y 2 refrescos. Nos cuesta 660
rup.
Volvemos al hotel a echarnos una
merecida siesta y a estar relajados en la habitación viendo series porque no
había mucho que hacer por nuestra cuenta en la ciudad (de hecho le habíamos
preguntado al guía y nos había confirmado que no.
Aún así salimos a las 19:30h a
una tienda enfrente donde compramos el imán de rigor para la nevera y una
postal y regresamos al hotel a la terraza a tomar unas cervezas mientras
disfrutamos de buena música. Por cierto que mientras estábamos allí van pasando
al lado nuestro varios monos como si nada.
A las 21:15h bajamos a cenar y de
nuevo a la habitación para descansar.
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