ALEMANIA SUR 6


DÍA 6

20 de Junio 2012


Salimos del hostal y después de desayunar, nos vamos con el coche hacia los castillos más famosos de Alemania e incluso del mundo. Se encuentran en HOHENSCHWANGAU, muy cerca de Fussen y al llegar vamos directos a las taquillas que se encuentran a la entrada. Compramos entradas para los dos castillos principales y comenzamos la visita por el Castillo de Hohenschwangau.

Hohenschwangau
Hohenschwangau
Este castillo fue residencia en la infancia de Luis II de Baviera (el rey loco) y construido por su padre donde se encontraba una fortaleza del s.XII, reconstruyéndolo en el s.XIX. Por fuera es de un llamativo color amarillo y por dentro se pueden visitar las distintas estancias que mantienen numerosos muebles y objetos originales.

Castillo de Hohenschwangau
Castillo de Hohenschwangau
Castillo de Hohenschwangau
Castillo de Hohenschwangau
Nos gusta mucho, pero no podemos esperar para visitar el siguiente castillo, y el más famoso, el Castillo de Neuschwanstein. Se encuentra en lo alto de una colina y decidimos subir en el autobús que hay específico para ello a pesar de la fila que había.

Una vez arriba, primero fuimos al puente mirador desde donde se puede observar el castillo en la distancia para poder ver su grandiosidad y romanticismo. Fue construido por el rey Luis II de Baviera cuando ya no eran necesarias este tipo de fortalezas, sólo para mostrar al mundo la belleza, a pesar de que provocó el endeudamiento que provocó al país. La insistencia del rey aunque la banca le amenazaba con el embargo provocó que en 1886 el rey fuera incapacitado y muriera poco después en un lago de Munich en extrañas circunstancias.

Castillo de Neuschwanstein
Hicimos numerosas fotos para acudir a las puertas del castillo y tras esperar a nuestro horario (todo controlado por la entrada), vimos las habitaciones y los lujos interiores. Ya saciados de tanto cuento de hadas, bajamos de nuevo al pueblo esta vez caminando (la verdad es que la subida nos habría agotado cuando vimos lo que era bajar) y regresamos al coche.

Castillo de Neuschwanstein
Castillo de Neuschwanstein
Castillo de Neuschwanstein
Decidimos irnos a GARMISCH-PARTENKIRCHEN, que se encuentra en la zona y en donde se sitúa la montaña más alta de Alemania. Nuestra primera intención era aprovechar que ya estábamos cerca para subir con el tren cremallera y el telesilla a la cima, pero en la oficina de turismo nos informaron de que debido al mal tiempo en la montaña, se habían suspendido ya los viajes a lo alto. Un poco desilusionados buscamos un sitio para comer y la verdad que tuvimos la suerte de, a través de la guía, encontrar un restaurante estupendo en el que disfrutamos del mejor codillo del viaje. Aunque molestaban bastante las moscas, lo comimos en una mesa exterior porque hacía un día estupendo. Se trata de Braustuberl (Fürstenstr. 23 82467 Garmisch-Partenkirchen, Alemania, Baviera).



Ya bien comidos, de nuevo al coche para llegar a la ciudad de MUNICH. Lo primero fue con el coche acercarnos al famoso estadio de fútbol del Bayern, el Allianz Arena que vimos desde la distancia. Después, no nos cuesta mucho encontrar el Hotel Meininger (Landsberger Straße 20, 80339 München, Alemania) donde teníamos reservada una habitación con dos literas para 4 noches. Es más como un albergue juvenil pero no tuvimos problemas y además estaba cerca del centro.

Hotel Meininger, Munich
Hotel Meininger, Munich
Tras dejar nuestras cosas, con el tranvía nos acercamos al centro de Munich, donde paseamos por la plaza del ayuntamiento, la catedral, la puerta de la Victoria y las calles de alrededor. No podíamos dejar de entrar, aunque sólo a mirar porque estaba abarrotado de gente, la Staatliches Hofbräuhaus in München, la cervecería más conocida y turística. Después del paseo volvemos hacia el hotel caminando y paramos en un pequeño restaurante de barrio para cenar algo rápido antes de irnos a descansar.

Munich
Munich
Munich
Munich
Munich






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