LOS VIAJES DE CAROL ... Y LEO: GRECIA 8

DÍA 8

9 Octubre 2021

Quedamos a las 8:10h porque habíamos reservado para desayunar a las 8:15h (debido a la pandemia había que reservar horario para no juntarnos demasiados en el comedor).

A las 9:15h, ya desayunados y arreglados, nos ponemos en marcha que teníamos una mañana larga porque en teoría daban lluvias a partir de las 15:00h

Directamente lo primero que hacemos es ir a la Acrópolis. Nos ahorramos la fila de las taquillas (ya teníamos la entrada combinada del día anterior) y entramos al monumento más importante de Atenas y también de la historia antigua de Europa.

El significado de la palabra ‘akrópoli’, ciudad en lo alto, hacer honor a su nombre, ya que el emplazamiento sobre el que se erige se encuentra a 156 metros sobre el nivel del mar. Concebido como un recinto fortificado y como lugar de culto, la Acrópolis alberga en su interior algunos de los edificios más representativos de la antigua Grecia, con el Partenón como templo más significativo, considerado aún hoy en día como la ‘joya de la corona’ de la arquitectura helena. Los Propíleos, el Templo de Atenea Niké, el Odeón de Herodes Ático, el Erecteion y el Teatro de Dionisios, en la ladera sur, son las principales estructuras que actualmente completan el yacimiento arqueológico.

Las obras de construcción de la Acrópolis fueron iniciadas mediado el siglo V a. C. y promovidas por Pericles, el artífice de la idea de la idea de acompañar los grandes logros políticos y culturales de la Atenas del momento con obras públicas que la situaran como la polis griega de referencia, otorgándole a la ciudad una de sus épocas de mayor esplendor.

Comenzamos la visita viendo desde la altura los dos teatros. El Teatro de Dionisos tenía cabida para 16.000 espectadores. El Odeón de Herodes Ático es el más sublime de los antiguos teatros griegos que se conservan actualmente en Atenas. Las obras para su construcción comenzaron en el año 161 gracias al mecenazgo de Herodes Ático, orador y político griego pro romano, en honor de su difunta esposa. De menores dimensiones que su vecino tenía una capacidad para albergar un aforo de unos cinco mil espectadores, aproximadamente.

Odeón de Herodes Ático, Acrópolis, Atenas

Teatro de Dionisos, Acrópolis, Atenas

Ya en la explanada principal, tras atravesar los Propileos que tenían la función de pórtico y vestíbulo. Están compuestos por columnas dóricas y jónicas y muros de sillares almohadillados.

Propileos, Acrópolis, Atenas

No podemos evitar ir directamente al Partenón porque es lo más emblemático de todo el conjunto monumental. Es el más bello templo del arte dórico que se conserva hoy día. Fidias dirigió su construcción entre los años 477 y 432 a. C. Tiene ocho columnas dóricas de mármol en cada fachada y otras 16 en los laterales. En el friso del entablamento figuraban las 92 metopas que describían la guerra de Troya y las luchas contra las amazonas y los centauros. La estatua de Atenea Partenos, de oro y marfil y quince metros de altura, fue llevada a Constantinopla y posteriormente destruida. En 1687, los turcos instalaron en la Acrópolis un polvorín que destruyó parcialmente el Partenón.

Partenón, Acrópolis, Atenas

Vistas de la ciudad desde Partenón, Acrópolis, Atenas

Partenón, Acrópolis, Atenas

Seguimos la visita por todo el complejo para terminar en el Erecteion. El hermoso edificio, tallado en mármol pentélico, fue construido entre los años 421 y 406 a.C. obra atribuida al arquitecto Filocles, y consagrada a Atenea, Poseidón y el mítico rey ateniense Erecteo. De los tres pórticos que abren la entrada al recinto destaca la del lado sur, donde las Cariátides, estatuas con forma de mujer que hacían las veces de columnas, soportaban el peso del piso superior. Las figuras que actualmente se encuentran en el lugar son réplicas de las originales, cinco de las cuales pueden apreciarse en el moderno Museo de la Acrópolis.

Erecteion, Acrópolis, Atenas

Hacía un día estupendo, soleado y con mucho calor a pesar de ser octubre y, como el día anterior llovió y además estábamos en sábado, estaba lleno de turistas. No nos queríamos imaginar como sería visitarla en julio o agosto entre mareas de gente y a 40°C.

Abandonamos la Acrópolis y justo a la salida se encuentra el Aerópago o colina de Ares, sede del Consejo que allí se reunió desde el 480 a. C. hasta el 425 d. C. Pero lo más importante de subir es porque las vistas hacia la Acrópolis son realmente espectaculares y también de toda la ciudad de Atenas.

Aerópago, Atenas

Vistas desde Aerópago, Atenas

Descendemos por el barrio de Plaka para llegar a la Puerta de Adriano. Construida por los romanos, el impresionante arco de 18 metros de altura separaba la antigua ciudad griega, también conocida como ‘Ciudad de Teseo’, de la nueva estructura urbanística concebida por Adriano y romana.

Barrio Plaka, Atenas

Arco de Adriano, Atenas

Justo al lado se encuentra el Templo de Zeus Olímpico al que entramos con la misma entrada combinada. medía 96 metros de largo y 40 metros de ancho. Se trataba de una impresionante construcción realizada en mármol del monte Pentélico, que constaba de 104 columnas corintias de 15 metros de altura, de las que hoy sólo se conservan 15. La construcción del Templo de Zeus Olímpico comenzó durante el gobierno de Pisístrato, en el siglo VI a.C. aunque, debido a diversos factores, la obra no se vería terminada hasta siete siglos después, en el año 132 d.C., bajo el gobierno del emperador Adriano.

Templo de Zeus Olímpico, Atenas

Vistas desde Templo de Zeus Olímpico, Atenas

A la salida nos dirigimos hacia el Jardín Nacional, pasando por el Zappeion y justo al lado empieza el cambio de guardia y, esta vez sí, mucho más bonito que el del día anterior.

Zappeion, Atenas

Cambio de guardia Jardines Nacionales, Atenas

Jardines Nacionales, Atenas

Desde ahí vemos el Estadio Panatinaico. Sede de los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna, en 1896, tiene unas dimensiones de 204 metros de longitud por 83 metros de ancho y una capacidad para albergar a 60.000 espectadores y está construido en mármol blanco. No entramos, pero desde fuera se pueden hacer unas buenas fotos.

Estadio Panatinaico, Atenas

Eran las 13:00h y estábamos agotados así que, poco a poco vamos regresando hacia el hotel y muy cerca encontramos un sitio muy chulo con terraza, el Athena’s Cook (Nikis 20, Athina 105 57), en el que en teoría íbamos a beber una cerveza, pero al final fueron dos cada uno de medio litro y ya aprovechamos para comer, mousaka, pasta, risotto y hamburguesa (un plato cada uno) y nos costó todo 85€ (con postre gratuito como otros muchos sitios).

Ahora sí muy cansados, pero eso sí, contentillos, nos vamos al hotel a echarnos una merecida siesta.

Nos juntamos de nuevo a las 17:10h y vamos a la Plaza Syntagma para coger un taxi que nos suba hasta el funicular del Monte Licabeto. Con una altura de 227 metros, es el punto más alto de Atenas. Nos cuesta 10€ llevándonos a los cuatro y luego el funicular ida y vuelta son 7,50€ cada uno (5€ sólo subida).

Funicular Monte Licabeto, Atenas

Esperamos 20 minutos y, una vez arriba, disfrutamos de las vistas más espectaculares de toda la ciudad de Atenas. Tras muchas fotos y estar un rato sentados observando esa maravilla, bajamos con el funicular y desde la entrada decidimos continuar andando hasta la plaza Syntagma. Al fin y al cabo era bajada y no supone esfuerzo.

Vistas desde Monte Licabeto, Atenas

Monte Licabeto, Atenas

Bajando del Monte Licabeto, Atenas

Nos vamos a Monastiraki pero era sábado y estaba todo llenísimo de gente joven dispuesta a una noche de fiesta. Compramos un imán para la nevera, hacemos unas fotos de noche de la ciudad y, volviendo hacia el lado del hotel, decidimos ir a tomar algo al mismo sitio del mediodía (habíamos pasado por varios restaurantes y estaban todos llenos con mesas reservadas) y tenemos la suerte de encontrar mesa en interior. Por cierto que, en Grecia, para acceder al interior de cualquier cosa, museos, restaurantes, bares… te exigen el certificado de vacunación y te escanean el QR.

Noche en Atenas

Cenamos y estamos allí hasta casi hasta la 1 de la madrugada charlando y riendo mientras bebíamos (cena y bebidas 113€). De ahí al hotel a descansar que al día siguiente nos íbamos de Atenas.

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GRECIA 2021 PARTE 5

LOS VIAJES DE CAROL ... Y LEO

GRECIA 8

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